Fin de semana de meteorología incierta y con previsión de chubascos por todos lados ¡vaya panorama! con pocas ganas de desplazarnos mucho para quizás no poder escalar decidimos apostar por lo seguro y nos decantamos por ir de nuevo a Rodellar ¡no, si al final me voy a aficionar a los desplomes! A pesar de que toda la semana había estado lloviendo y de que nos habían dicho que chorreaba bastante seguro que algo podríamos hacer, sobretodo porque a los grandes desplomes con chorreras no íbamos a ir!
Salimos de casa lloviendo y nos acompañó durante todo el camino, pero al llegar a Rodellar parecía que aguantaría. Nos tomamos el cafetito de rigor mientras esperábamos a que llegase el resto de la gente y justo cuando nos poníamos de nuevo en marcha se puso de nuevo a llover, pero fue sólo un poquito, permitiéndonos llegar hasta el Camino, donde aparcamos los bártulos al comprobar que estaba seco. Así que de nuevo pasamos aquí la jornada donde probé alguna bonita e interesante vía.
Al día siguiente coincidíamos sólo Lombas y yo y decidimos salir del Camino. Como la mayoría de las zonas estaban mojadas le propuse subir a las placas que hay a ambos lados del Delfín pues se veían secas, son muy chulas y además Lombas no las conocía.
A pesar de la tormenta amenazante que oíamos muy cerca y de unas pocas gotas que cayeron el día acabó aguantando y salió incluso hasta el sol.
Y para acabar la jornada fuimos a mojarnos un poco los pies pues decidimos acercarnos a la pared de la virgen, por lo que tuvimos que cruzar varias veces el río.
Y bueno, al final para la predicción que daban para el fin de semana pudimos escalar los dos días ¡no está mal!
Salimos de casa lloviendo y nos acompañó durante todo el camino, pero al llegar a Rodellar parecía que aguantaría. Nos tomamos el cafetito de rigor mientras esperábamos a que llegase el resto de la gente y justo cuando nos poníamos de nuevo en marcha se puso de nuevo a llover, pero fue sólo un poquito, permitiéndonos llegar hasta el Camino, donde aparcamos los bártulos al comprobar que estaba seco. Así que de nuevo pasamos aquí la jornada donde probé alguna bonita e interesante vía.
Al día siguiente coincidíamos sólo Lombas y yo y decidimos salir del Camino. Como la mayoría de las zonas estaban mojadas le propuse subir a las placas que hay a ambos lados del Delfín pues se veían secas, son muy chulas y además Lombas no las conocía.
A pesar de la tormenta amenazante que oíamos muy cerca y de unas pocas gotas que cayeron el día acabó aguantando y salió incluso hasta el sol.
Y para acabar la jornada fuimos a mojarnos un poco los pies pues decidimos acercarnos a la pared de la virgen, por lo que tuvimos que cruzar varias veces el río.
Y bueno, al final para la predicción que daban para el fin de semana pudimos escalar los dos días ¡no está mal!
6 comentarios:
Esa Olatzi que me ha vuelto a ganar actualizándo.
Hombre claro! anda que no te queda a tí!!!
Q tio mas atractivo ese q esta pasando el rio
¿Dónde?¿cuándo?¡¡Yo no veo a nadie!!!
Para atractivo el de la camiseta naranja que está escalando. Aunque el que cruza el rio es un tio elegante.
Oye y qué pasa conmigo?? claro como yo no salgo en las fotos!!!
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