domingo, 18 de mayo de 2008

Echo-Aguas Tuertas

No todo es escalar y como este fin de semana ha estado que si llueve, no llueve y vuelve a llover, y además la tendinitis del dedo del pie de David le sigue dando guerra, pues nos lo hemos tomado tranquilamente y nos hemos ido a dar una vuelta al valle de Echo, que por cierto David no lo conocía y había que remediarlo!!!!



El día pintaba bueno, pero conforme subíamos por el valle se iba oscureciendo. Aún así está todo precioso y lleno de color. Las hayas ya han sacado las hojas, pintando el paisaje de un verde radiante y el agua, cayendo por todos lados, da frescura a los prados.




Al final acabó lloviendo un rato, incluso un granizó un ratito, pero aún así el paseo ha mercido la pena y hemos estirado las piernas, que falta les hacía.

sábado, 10 de mayo de 2008

Entre palcas

Bueno, pues en fines de semana lluviosos, iremos tirando de archivo para seguir contando cosicas.
Esta semana santa nos acercamos a la Pedriza, aprovechando que la mayoría de madrileños se irían a algún otro lado. No daban muy buen tiempo pero aún así decidimos acercarnos.
David, por supuesto, encantado, todo lo que sea granito y placas.... yo por mi parte un poco recelosa, principalmente por mi poca experiencia en este tipo de escalada y, fundamentalmente por mi falta de fe.



El primer día estuvimos en canto cochino y la tortuga, probándonos un poquito en las placas. Las primeras vías me costaron un poquito, pero luego le fui cogiendo el puntillo y me vi mejor de lo creía (no me veía ni siquieran en los IV!). Eso sí, los alejes en algunas vías fue lo que más me costó, independientemente del grado de la vía. A veces los veía muy lejos, me acojonaba y me rajaba. Al final tuvimos buena toma de contacto y, efectivamente, hubo muy poca gente.



Al día siguiente quedamos los pilukos (colegas de madriz) ¡¡juyuu, por fín nos veíamos!! y nos llevaron, para empezar, a las placas del halcón. Allí hicimos una vía de 3 0 4 largos, facilita y disfrutona, que me vino muy bien para mi cabeza.



Y qué bien!! allí cerca estaba un rebaño de cabras observándonos mientras tomaban tranquilamente el sol, y se paseaban por la pared a sus anchas (por esa por la que nosotros pasamos con cuerda).



Después fuimos a una pared que le habíamos echado el ojo mientras subíamos, "la placa de las nueve". Había unas cuantas vías muy chulas, que no hubiese probado si no hubiesen estado tan cerca los seguros (que bien para una aprendiza).


Empezó David con la primera vía, y yo no muy convencida del todo, me lo pienso.
Al final arranqué y llegué. Aquí ya apretamos un poco más y yo, la verdad, que después de cada vía bajaba psicológimente agotada.


Después David siguió con algo un poco más durete, que a mí se me quedaba, de momento, un poco grande, pero lo probé en tope.


El tercer días amaneció con mala pinta, viento, nubes, lluvia al fondo, pero aún así David me convenció para escalar un poquito. Así que allí que fuimos, hasta que decididamente se puso a llover.



Aprovechamos que nos daba tiempo y nos fuimos a comer a casa de mi hermano. ¡qué casita os estais currando!
El último día la pedriza estaba bastante cubierta de nubes, pero vimos una ventanita donde daba el sol y fuimos para allá, que era en "musgogénesis". Cuando llegamos caían copillos de nieve traídos por el viento, pero no se estaba mal del todo, así que aprovechamos a hacer alguna vieta antes de partir de nuevo a casa.
En resumen, un buen puente escalando en un sitio mágico, donde disfrutamos entre placas (para mi sorpresa). Aún así, cuando vamos a escalar en placas tiemblo....

domingo, 4 de mayo de 2008

Espolón Badalona

Volvemos a La Pared de Àger, pues estos días hay mucha gente por todos lados y aquí se estará más tranquilo.

Ahora sí venimos con una vía recomendada: "Espolón Badalona", esperando quedarnos con mejor sabor de boca. Y efectivamente así fue. Se encuentra más a la derecha de la Redrum y en el comienzo de la vía está escrito el nombre.


La primera parte del primer largo se hace un poco raro, pero luego la segunda parte, una especie de fisura diedro algo desplomada, pero con buen agarre, ya es algo más bonito.


El siguiente largo recorre una placa con buenas presas y con una fisura a la derecha muy facilona, escalo un poco despacio para disfrutar del gesto y asegurarme bien de la roca.


Luego viene el largo más difícil de la vía, con una salida de 6b, que se saca David tras apretar un poquito. A mí ya me cuesta algo más...


A continuación nos encontramos con un techo, que se hace entero en artificial (equipado). Me entran las dudas sobre si llegaré a las chapas, así que se lo encasqueto a David, que el otro día ya le pilló el callo.




El siguiente largo (el 5º) es, quizás, el largo más bonito de vía. Muy chulo, un muro gris compacto donde se va subiendo tranquilamente, mientras te fijes donde poner los pies antes de cada paso, porque sino después de dar el paso no los ves. Y al final, hay que superar una pequeña pancita.


Este largo nos deja en la feixa, desde donde se puede escapar de la vía, y la verdad, lo recomendamos, porque el siguiente largo es más que nada un trámite, a nuestro gusto feo, para llegar arriba de la pared. Tiene un primer tramito de roca, luego un paseo por un especie de feixa y luego otro tramito de roca lisa, donde hay dos pasos de artificial equipado, para ya salir arriba. En fín que en esta última parte no se escala mucho.

La verdad es que este espolón tiene largos muy largos (50m) y muy guapos todos, exceptuando el último. Sólo decir, que éste último es mejor hacerlo del tirón, aunque rozará mucho la cuerda, eso o salir por la feixa después del quinto largo. Una via recomendable.


Croquis de la vía: http://www.onaclimb.com/




Redrum

Primera visita a las Paredes de Àger, una pared muy tranquilita situada entre el bullicioso Terradets y mítico Montrebei. La larga aproximación por carreterilla hace que nos encontremos con pocas cordadas, incluso en días tan concurridos como este puente de mayo.


Como no teníamos referencias, elegimos, entre los croquis que teníamos, la vía Redrum, situada en el Sector principal del Cap de Ras.
Por cierto, la palabra "redrum" es "murder"(asesino en inglés), escrito al revés y aparece en una escena de la película El resplandor, en la que el niño escribe esta palabra en una puerta con un lápiz de labios.






El primer largo de la vía recorre al principio una fisura y luego, se desvía un poco hacia la derecha, para salvar un techo que tenemos encima. Un largo algo exigente en el que David mete un friend para proteger algún paso. En la reseña ponía V+, Ao, pero se lo sacó en libre!




El segundo largo sigue un diedro fisura, hasta llegar justo a la altura de la travesía del tercer largo. ¡Qué ambiente!, disfrutón y con mucho patio.



Se van sucediendo largos facilitos, con algún tramo de roca un poco peor, pero aún así, tiene secciones muy compactas y chulas.


Llegamos al séptimo largo, que sale por una pancita con cantos romos y sudados y que se puede hacer en artificial equipado, siempre y cuando siga el cintajo largo que hay en la tercer chapa, porque sino a ver quien llega al siguiente seguro! Se prepara David, y a falta de estribos, buenas son las pedaletas improvisadas con algún cintajo. La verdad es que hacía mucho tiempo que no hacía ésto de acerar y meter estribos y ... hombre! tampoco esta tan mal, y además si te libra de una apretada de escándalo...(a quién le apetece hacer un 6c de bloque con el calor que hacía?), pero lo que más cuesta, es salir de estar escalando en artifo a escalar en libre, ese pequeño momento que piensas... a la de tres, cambio el chip y... eeepaa!! a escalar se ha dicho...


El siguiente, y último largo, tiene una salida por un techito, llega a una pequeña repisita, y sigue la pared. Éste le toca a Olatz. El techito tiene muy buen agarre, así que subo pies y...ya estoy arriba, en la repisa. Jodó, ahora el siguiente seguro estás super alto, me estiro pero no llego, busco una piedra para subir unos cm pero no la hay ¡qué manía con poner las primeras chapas tan altas, que algunas somos bajitas! Total, que tengo que hacer malabares y darme el paso para llegar, y con el anterior seguro debajo en el techito. Lo chapo y me cuelgo ¡bastante me había costado chaparlo! Intento los dos siguientes pasos, pero acabo acerándolos. En una de las reseñas que llevábamos lo ponía como Ao, así que después de probarlos un poco y ver que no me salen así tan fácilmente los acero (bueno y me pongo una pedaleta para llegar, je, je) y no me complico. Como bien decía David, lo que más cuesta es salir del artifo a escalar en libre!



Hacemos la vía relativamente rápidos y, para nuestra sorpresa, llegando a la cima nos damos cuenta que nos acompañan una gran cantidad de parapentistas (¡cerca de 30!) que se lo pasan de lo lindo sobrevolando las paredes, ¿qué pensarán de nosotros? ¿qué pensarán que pensamos nosotros de ellos? a mí, encanatado de que vuelen, mientras no se les ocurra escupirnos desde ahí arriba!




La vía está guapa a medias, algún largo chulo mezclado con otros regular. Va perdiendo interés e intensidad según se van subiendo metros, pero como toma de contacto con la pared está bien, aunque no es un viote de esos que dices... la vuelvo a repetir.

Croquis de la vía: http://www.inazio.com/



Como todavía teníamos la tarde por delante, decidimos acercarnos al congosto de Montrebei a conocerlo, e ir por el camino que cruza su pared.

Por cierto la carretera que cruza de las Paredes de Àger, a la zona de Montrebei pasa por el Coll d'Àger, que tiene unas vistas espectaculares de todo el Pirineo. Así que si os acercais a escalar a Àger, no dudeis en subir hasta el Coll.


Bueno, y en Montrebei dimos un paseo por el camino que llega hasta la impresionante Pared de Catalunya.



Como dice una inscripción en una placa clavada en el congosto: Terradets es para los niños, Regina para los hombres y Montrebei para los super-hombres. Así que tendrá que esperar, porque todavía no somos ni hombres...

Cavallers

Nos hemos acercado a Cavallers (en la Vall de Boí), pues David tenía mono de granito. La tarde que fuimos estaba un poco nublado y con viento, pero como no daban muy malo para el día siguiente nos quedamos a dormir allí esperando poder escalar al día siguiente.

Qué decir de Cavallers...¡un paisaje precioso! y vías de todo tipo, deportiva, largas equipadas, semiequipadas...





Y efectivamente al día siguiente amaneció estupendo, así que desayunamos tranquilamente al solecito y nos acicalamos un poco en el río: nos lavamos la cara, David metió sus pies en el agua, a ver si con lo fria que estaba, curaba su tendinitis del dedo gordo del pie...






Fuimos primero a hacer algún V de placa, pues a mi esto de la adherencia me cuesta cogerle el puntillo. David sin embargo está en su salsa y ya me metió en alguna un poco más chungueta.






Despues de quejarme un poco por el viernto que hacia en el primer sector,cambiamos a otro mas resguardado y no veas que diferencia de estar con la chupa de gore a escalar en tirantes...

Encontramos alguna fisura y a David se le abrieron los ojos...¡¡Fisuras!! Eran vías facilitas, así que aprovechamos para meter cacharros, ¡pero qué bien entran!






Así pasamos el día, entre placas y fisuras, practicando un poquito para cuando volvamos a hacer "deberes" que tenemos aquí pendientes. Por cierto, ¿alguien sabe de fisuras asequibles donde poder seguir practicando?