La verdad es que no teníamos muy claro qué vía hacer y según subíamos íbamos cambiando de opción.
Al final, al llegar a la Punta Maria Luisa y ver el pedazo diedro de la Ayuso lo tuvimos claro.
Empieza David con el primer largo, y al final decide empalmarlo con el segundo para lo cual tengo que trepar un poco para llegar a una repisa, pues la cuerda sino no llega.
Y jodó, vaya primer diedro, V pero a mí se me hace un poco raro. Total que me planto en la segunda reunión miro para arriba y vaya diedrazo! ¿y eso me toca a mí? por supuesto, David no me da tregua.
Con ganas, porque se ve bonito, pero acojonada, empiezo a subir la primera parte que se supone que es más fácil, pero como voy más tensa que otra cosa aprieto más de lo necesario y se me hace igual de duro.
Aún así voy subiendo poquito a poco hasta que llego al último tramo, que un poco más desplomadillo. Venga, un último apretón en bavaresa y..... síiiiii, reuniónnnnn. Estoy reventanda, pero más feliz que una perdiz, me lo he peleao y me ha salido!!!! Qué largo más bonito!!!!!
Sube David, también más contento que otra cosa y sigue con el siguiente largo, que también tiene sus pasitos.Luego queda el último largo, que tiene un pasito de chimenea, pero que no veas si me costó pasarlo porque o te sales muchísmo hacia afuera o sino no entras.
Y así acabamos esta vía, corta pero intensa y superbonita. Ahora sólo queda hacer un rápel por la cara opuesta, con vista a la aguja negra y la Amezua, y destrepar por una barranquera hasta el pie de vía. Y de aquí de nuevo para abajo, aunque con idea de subir otro día si el tiempo lo permite.
¡Qué sitio Galayos!
Al día siguiente parecía que aguantaría el tiempo así que decidimos volver al Torozo, esta vez para hacer la Moby Dick, vía que se nos quedó pendiente la última vez que estuvimos aquí y de la que tuvimos que bajarnos por mal tiempo. Pero esta vez parecía que haría bueno, por lo menos amaneció despejado.
Llegamos y David se puso enseguida manos a la obra con el primer largo ¡cómo le gusta este largo! a mí sin embargo, no sé porqué me da un yuyu.... A todo ésto el cielo ya no estaba tan despejado y poco a poco se empezó a cubrir de nubes sospechosas.
Llegamos y David se puso enseguida manos a la obra con el primer largo ¡cómo le gusta este largo! a mí sin embargo, no sé porqué me da un yuyu.... A todo ésto el cielo ya no estaba tan despejado y poco a poco se empezó a cubrir de nubes sospechosas.
Llego a la primera reunión y me prepara para salir. Salgo y tras dar un par de pasos... oh oh, me ha caído alguna gota. Oh oh, ahora en lugar de gotas están cayendo pequeños granizos. Miramos al cielo y lo vemos cubierto y gris, aunque no demasiado.
Vuelvo a la reunión ¿qué hacemos? al final decidimos bajar pues tiene pinta que antes o después lloverá de verdad y total para tener que bajarnos de más arriba pues nos bajamos ahora.
Así que otra vez se nos resiste Moby Dick, pero no nos desanimamos volveremos!!!!!
Al final aguantó un poco el tiempo, pero irremediablemente acabó lloviendo fuerte y no sólo ese día, sino los restantes, por lo que nos despedimos de esta zonas hasta la siguiente visita!!!!
Así que otra vez se nos resiste Moby Dick, pero no nos desanimamos volveremos!!!!!
Al final aguantó un poco el tiempo, pero irremediablemente acabó lloviendo fuerte y no sólo ese día, sino los restantes, por lo que nos despedimos de esta zonas hasta la siguiente visita!!!!
4 comentarios:
Bonita actividad... yo aquí sigo aprendiendo de granito que soy más torpe jejejejejjeej...
Venga un saludicooooo
Ya claro, torpe, jaja. A ver cuando nos enseñas...
joder olatz,estas mas fuerte que el vinagre,a ver si me subo por ahi y trepamos algo,soy ramon el rasta,colega de chuse y esta peñita,un beso
Ostia, Rastamón???cómo me has encontrao?? jaja ¡vaya sorpresa! pues ya ves que yo por aquí sigo...y escalando todo lo que puedo, más enganchada que pa qué!!!!
Pues nada un saludo y a ver si nos vemos!!!
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